El cerebro, el corazón y los sentidos invitan a dejar registro escrito de lo que nos acontece, de lo que observamos, escuchamos, paladeamos y vivimos día a día. Aqui presento mi visión personal del asunto.
16 febrero 2008
Sorprendentes Coincidencias
Curioseando en uno de mis sitios web preferidos, encontre un listado de 15 interesantes coincidencias, adecuadamente documentadas. Esto último les quita un poco ese barniz de leyenda urbana con el que algunas casualidades similares llegan a nuestros oídos. Traduje libremente las que mas me gustaron y aquí están, en orden inverso finalizando con la que más me impresionó:
7) El libro de la niñez: Mientras la novelista norteamericana Anne Parrish estaba curioseando por algunas librerías en Paris (en los años '20 del siclo XX), se encontró con un libro que fue uno de los favoritos de su niñez: "Jack Frost And Other Histories". Ellá tomó el viejo ejemplar (usado) y se lo mostró a su esposo, comentándole cuanto le recordaba su época de niña. Su esposo tomo el libro, lo abrió y encontro esta inscripción en la contratapa: "Anne Parrish, 209 N. Weber Street, Colorado Springs.” ¡Era el propio libro de Anne Parrish!
6) El bebé que cayó 2 veces: En 1930, un hombre llamado Joseph Figlock pasó a ser una figura muy importante en la vida de una joven (y por lo visto muy descuidada) madre en Detroit (EEUU). Mientras el Sr. Figlock caminaba por la calle, un bebé cayó de una ventana en un segundo piso, impactando contra la humanidad del susodicho. Ambos salieron ilesos del accidente. Un año después, el mismo bebé cayó de nuevo desde la misma ventana... otra vez sobre el Sr. Figlock, resultando de nuevo ilesos ambos.
5) Fotografía: En 1914, cuando aun se estilaba revelar las placas fotográficas individualmente, una mujer alemana dejó la placa con la que había fotografiado a su hijo en un establecimiento en Estrasburgo para ser revelada. Al estallar la Primera Guerra Mundial, se le hizo imposible recogerla y la dió por perdida. Dos años después, la misma mujer compró una placa fotográfica virgen en Frankfurt (a casi 200 Km. de distancia de Estrasburgo) para tomar una foto de su hija recién nacida. Al ser revelada, esta placa mostró una doble exposición, mostrando la imagen de su hija tomada en 1916 superpuesta a la del hijo fotografiado en 1914. Por una increíble casualidad, la placa dejada en Estrasburgo había sido confundida con una placa virgen, y vendida como tal en Frankfurt dos años despues, a la misma mujer.
4) Una de Poe: En el siglo XIX Edgar Allan Poe escribió un libro llamado "The narrative of Arthur Gordon Pym". Se trataba de un relato sobre un naufragio, en el que los 4 sobrevivientes deriven en un bote por varios días, hasta que tres de ellos deciden matar al grumete para comérselo. En el relato, el nombre del grumete era Richard Parker. Algunos años después, en 1884, el bergantín Mignonette naufragó, y sus 4 sobrevivientes derivaron largo tiempo en un bote. Eventualmente los 3 miembros mas viejos del bote decidieron matar al grumete para comérselo. El nombre del grumete era Richard Parker.
3) Coincidencia Real: En Monza (Italia) el rey Umberto I acudió a un restaurante en compañía de su Aide de Camp, Emilio Ponzia-Vaglia. Mientras el dueño del restaurante tomaba la orden, el rey Umberto I notó que el mismo y el dueño del restaurante eran prácticamente dobles, en cara y complexión física. Ambos empezaron a conversar sobre el tema, y salieron a relucir las siguientes coincidencias:
- Ambos nacieron el mismo día, en el mismo año (14 de Marzo de 1844)
- Ambos nacieron en el mismo pueblo
- Ambos se casaron con una mujer llamda Margherita
- El dueño del restaurante abrió su negocio el mismo día que Umberto I fue coronado rey.
El 29 de Julio de 1900, el rey Umberto I fue informado de la misteriosa muerte del dueño del restaurante, en un misterioso accidente en el que un disparo acabó con su vida. Mientras expresaba sus condolencias, un anarquista de entre la multitud le disparó al rey, matándolo en el acto.
2) El escarabajo dorado de Jung: En su libro "Estructura y Dinámicas de la Psique" Carl Jung anota: "Una mujer que yo estaba tratando tuvo, en un momento crítico, un sueño en el cual alguien le dió un escarabajo dorado. En el momento en el que ella me relataba esto, yo me encontraba sentado de espaldas a la ventana cerrada. Súbitamente oí un ruido detras de mi, como un suave golpeteo. Me volteé y vi un insecto volador golpeando contra el vidrio de la ventana. Abrí la ventana y atrapé el insecto cuando entro volando, el insecto resultó ser la analogía más cercana a un escarabajo dorado que puede hallarse en nuestras latitudes, un ejemplar de la especie Cetonia Aurata que, contrario a sus costumbres, había sentido la urgente necesidad de entrar en un recinto oscuro en ese momento. Debo admitir que nada similar me ha ocurrido antes o después, y que el sueño de esa paciente ha permanecido como una experiencia única".
1) Muerte vengadora: En 1883 Henry Ziegland rompió una relación con su novia quien, desilusionada, se suicidó. El hermano de la chica, en un arrebato de furia, persiguió a Ziegland y le disparó. Creyendo haberlo matado, se suicidó a continuación. Sin embargo, Ziegland no murió. La bala apenas rozó su cara, alojándose en el tronco de un árbol. Años después, Ziegland decidió talar ese árbol, que aún conservaba la bala. El gran tamaño del árbol lo hizo optar por dinamitarlo. La explosión de la dinamita hizo que la bala saliese despedida del árbol... diréctamente hacia la cabeza de Ziegland, matándolo.
Impresionante, ¿verdad?
Las coincidencias (en inglés) en: http://listverse.com/bizarre/top-15-amazing-coincidences/
El sitio web que siempre me entretiene (en inglés): http://sprott.physics.wisc.edu/Pickover/pc/realitycarnival.html
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3 comentarios:
Ahh, estos relatos me entretienen un montón, son buenísimos para distraerse (en el baño por ejemplo) jajaja! Cuando me tengo que subir en un avión como voy tan asustada y no me puedo concentrar por períodos largos siempre llevo libros de cuentos cortos, esto es otra buena opción.
Feliz domingo!
Alguna la conocía y claro es natural nuestra extrañeza. Deslumbran. Algunas parecen de realismo mágico.
Y la de Henry Ziegland....demasiado.
Saludos.
El relato de Ziegland te hila la sangre.
Saludos.
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