26 diciembre 2023

Una vida de fábula

 

Un día fui a consultar a un famoso taumaturgo que me auguró que yo, Zoyla Cegarra, llevaría una vida fabulosa (o al menos eso creí entender).  El hecho de ganarme un importante premio en la lotería esa misma noche me convenció de su infalibilidad, así que al día siguiente abandoné al trabajólico de mi novio, dejé atrás mi vida gris y anodina de secretaria y corrí a comprar boletos para viajes de placer además de ropa lujosa, perfumes caros y todos los caprichos que siempre había querido darme sin que mis magros ingresos lo permitiesen.

 

Al regresar, tres meses de locura después, constaté que un anónimo hacker había vaciado mi cuenta bancaria, dejándome en la quiebra.

 

Tragándome mi orgullo, volví a casa para pedirle a mi ex que perdonase mi error juvenil y retomásemos la vida juntos. Me abrió la puerta una mujer a quien yo conocía, Elba Chacón; compañera de trabajo de mi ex novio, tan trabajólica como el… y que en el interín había pasado a ser su esposa, como ella misma se encargó de informarme sin reflejar emoción ninguna en su cara chata y fea antes de cerrarme la puerta en las narices.

 

Hoy, mientras rumio mi miseria en el refugio de gente sin hogar en el que me encuentro; muerta de hambre y de frío como condición permanente, mis días transcurren cavilando sobre que me llevó a interpretar como “fabulosa” la expresión “de fábula”, que fue la que realmente dijo el brujo y paso mis noches lanzándole maldiciones a Esopo, Samaniego, La Fontaine y todos esos que escribieron y reescribieron la fábula de la cigarra y la hormiga que hoy sufro.


No hay comentarios: